Nadie como un buen escritor para dar consejos a los escritores que empiezan. Os dejo estos cuarenta consejos de Umberto Eco, todos imprescindibles y certeros. Analiza cada uno y piensa cómo pueden mejorar tu manera de escribir para evitar errores que empobrecen tu estilo narrativo. Imprime esta lista y tenla muy a mano cuando te pongas a escribir tu novela, deben ser tus “Mandamientos” de escritor.
- Evita las aliteraciones; solo gustan a los “estúpidos”.
- No abuses del subjuntivo: utilízalo solo cuando sea necesario.
- Evita las frases hechas: son como la “sopa recalentada”.
- Escribe tal y como te expresas.
- No uses siglas comerciales ni abreviaciones.
- Acuérdate (siempre) de que el paréntesis (aun cuando parece indispensable) interrumpe el hilo del discurso.
- No te propases con los puntos suspensivos.
- Limita el uso de las comillas. Las citas no son “elegantes”.
- No generalices.
- Los barbarismos no son de buen gusto.
- Restringe las citas. Emerson dijo con razón “Odio las citas. Cuéntame solo lo que sabes”.
- Las comparaciones son equivalentes a las frases hechas.
- No seas redundante y no repitas dos veces la misma cosa. Redundancia es explicar algo que el lector ya ha entendido.
- Solo los necios emplean palabrotas.
- Intenta siempre concretar.
- La hipérbole es una excelente técnica expresiva.
- No construyas frases de una sola palabra.
- Cuidado con las metáforas demasiado atrevidas: son “plumas sobre las escamas de una serpiente”.
- Pon las comas en el lugar adecuado.
- Aprende a distinguir entre la función del “punto y coma” y la de los “dos puntos”: no es tarea fácil.
- Si no encuentras el vocablo idóneo, no recurras a la expresión coloquial: “el parche es peor que el agujero”.
- No uses metáforas incoherentes, aunque suenen bien. Son “como cisnes degollados”.
- ¿Son de verdad necesarias las preguntas retóricas?
- Sé conciso y trata de condensar tus pensamientos empleando el mínimo número de palabras y evitando las frases largas; así evitaras que tu discurso esté contaminado (una de las tragedias de nuestro tiempo dominado por el poder de los medios de comunicación).
- Los acentos no son ni incorrectos ni inútiles, quien los omite se equivoca.
- No se apostrofa un artículo indeterminado antes de un sustantivo masculino (el apóstrofo [‘] es una coma que se coloca en la parte superior derecha de una palabra. En castellano apenas se utiliza, solo por influencia del inglés con el genitivo sajón).
- ¡No enfatices demasiado! ¡Mide los signos de admiración!
- Ni siquiera los amantes de los barbarismos pluralizan las palabras extranjeras.
- Escribe correctamente los nombres extranjeros como Baudelaire, Roosevelt, Nietzsche y parecidos.
- Cita sin perífrasis los autores y los personajes a los que te refieres, tal y como lo hizo el más grande escritor lombardo del siglo XIX, el autor de El 5 de mayo.
- Al principio del discurso utiliza la “captatio benevolentiae”, para congraciarte con el lector (pero a lo mejor ustedes son tan estúpidos que no entienden lo que estoy diciendo).
- Cuida con detalle la ortografía.
- No hace falta decir que las pretericiones (decir lo que no vas a contar) son desesperantes.
- No pongas punto y aparte muy a menudo; solo cuando sean necesarias
- No uses el plural “majestatis”. Causa una impresión pésima.
- No confundas causa con efecto: podrías equivocarte y cometer un error.
- No construyas frases en las cuales la conclusión precede a las premisas: si lo haces, las premisas se podrían deducir de las conclusiones
- No utilices arcaísmos como “hapax legomena” u otros lexemas inusuales, así como estructuras profundas de rizomas, que superen las habilidades cognitivas del destinatario.
- No seas prolijo, pero tampoco te quedes corto.
- Cada frase ha de tener un significado, con independencia del contexto.
Fuente: serescritor.com
Tus consejos me ayudan mucho