La novela policíaca y el thriller van viento en popa. Desde el fenómeno Millenium, del que me declaro ferviente admiradora, los lectores amantes de este género quieren historias que les mantengan en vilo. Historias de suspense y misterio, con grandes dosis de intriga, bien escritas y bien documentadas.Pero en escritura, lamentablemente, no existen las recetas. No es como en cocina, que cuando hacemos la receta de un pastel y la seguimos al pie de la letra, lo normal es que salga a la perfección. Pero la buena noticia es que aunque no existen recetas mágicas para escribir una buena novela policíaca, al menos, sí que podemos hablar de cuáles son los ingredientes necesarios para escribir un buen thriller. Porque aunque parezca un estilo abordable y fácil de escribir, la verdad es que las técnicas para conseguir una buena trama policíaca son bastantes complejas y conllevan cierta dificultad. Así pues, para conseguir una novela policíaca y una trama atractiva, los ingredientes que nunca fallan podrían ser estos:
1. Un buen asesinato, a ser posible con mucha sangre… y violento, desde luego.
2. Caldear la atmósfera con la descripción del cadáver o de los cadáveres. En esto nadie lo hace tan bien como Patricia Cronwell y su forense la Dra. Kay Scarpetta, uno de mis personajes favoritos de novela policíaca.
3. Conseguir que el personaje del inspector de policía o detective privado sea un personaje fuera de lo común. Inteligente, astuto, que no respete las jerarquías ni las reglas. En este sentido, un de mis inspectores favoritos es el comisario Sharko, el personaje creado por Franck Thilliez, para la saga de thrillers cuyo primer título es El ángel Rojo.
4. El inspector suele ser un personaje divorciado, su mujer le ha abandonado o es viudo por una muerte trágica.
5. Conseguir un alter ego del protagonista atractivo. Un personaje que apoye al inspector, que le anime a no venirse abajo y que le haga seguir adelante con sus certezas y sus averiguaciones, ayudándole a aclarar sus dudas.
6. Un asesino fuera de lo común, perverso, de mente diabólica, torturador y escurridizo.
Es importante para un escritor que quiera escribir novela policíaca que lea todo lo que pueda de este género, y que se documente bien sobre los aspectos médicos, científicos y sobre las nociones de criminología indispensables para escribir una trama policíaca o novela negra. Documentarse sobre las etapas de la investigación, los métodos de la policía científica y del análisis de indicios y pistas es muy importante para el correcto desarrollo de la trama y para que la historia resulte creíble.