Las escenas de acción en una novela te permiten que la historia avance más deprisa sin tener que atascarte en largas descripciones y  explicaciones  eternas sobre tus personajes: una llamada telefónica por sorpresa, una visita inesperada, un retraso inoportuno provocarán que tu personaje tenga que responder rápidamente y así el ritmo de la trama se amplificará.

Lo importante para escribir una buena y efectiva escena de acción es  asegurarte de que ocurra lo que ocurra, este hecho obligue a tu personaje a reaccionar; esto ayudará a mostrar su personalidad y su capacidad para reaccionar y para  afrontar los problemas y todo ello a la vez afectará a lo que ocurra más adelante en tu novela. Pero si hay algo importante en una escena de acción es que esta escena  depende del movimiento físico alrededor del espacio que has creado en ese momento determinado. Para que haya acción tiene que haber movimiento y el lector tiene que percibir una sensación del paso del tiempo.

Pero además, para conseguir que el lector se sienta parte de esa acción, debes utilizar  estas técnicas:

  • Asegúrate de que los hechos suceden en tiempo real, haciendo que el lector forme parte de la acción y de los sucesos de esa escena.
  • Haz que el ritmo sea rápido incluyendo algún tipo de movimiento físico.
  • Obliga al protagonista a tomar decisiones de manera rápida o a reaccionar de manera más instintiva que usando la razón.
  • Crea consecuencias inesperadas para el protagonista que aumenten el nivel de suspense y de drama de la escena.

Pero mientras escribes estas escenas de acción, ten en cuenta que es muy fácil tender a exagerar y que la escena pierda credibilidad por lo que como comenta Rosenfeld:

“Este tipo de escenas van a llevar al lector hacia delante en la historia, pero algunos lectores tienen tendencia a saltarse las escenas de acción si se alargan y  resultan exageradas o si hay demasiadas escenas de acción, por lo que tendrás que encontrar un equilibrio entre las escenas de acción y otro tipo de escenas para que tu novela no se tambalee con un exceso de acción.”

 

 

Imagen: Adobe Stock

Fuente: Make a scene. Jordan E. Rosenfeld